Conmovedora historia de dos mujeres afganas y de sus familias
que contiene la conocida novela «Mil soles espléndidos» de Khaled Hosseini. Está
basada en hechos reales, hay que decir, de un sabor agridulce. Muestra la vida más
que dura durante las guerras en Afganistán que dejan rastro de destrucción y de
barbarie, rusos, talibanes, norteamericanos. Pero sobre todo el sufrimiento de
dos mujeres Mariam y Laila que representan el de otros miles de mujeres
tratadas casi como animales.
Aunque el mundo musulmán tenga cosas buenas, por ejemplo la
fe sencilla y perseverante en Alá, no obsta para que muchos hombres -que son
demasiados- abusen de las mujeres como dueños de animales para su satisfacción
y desahogar su ira y frustraciones; es el caso de Rashid que se casa con la
joven Mariam y años después cuando ella no puede darle hijos se casa con Laila.
Es el abuso institucionalizado sobre mujeres prisioneras en
casa de su dueño, porque tiene poco de marido: solo las necesitan para
reproducirse, cocinar y limpiar. Los talibanes aparecen como bárbaros asesinos
sembradores de muerte y destrucción. No es exageración pues reconozco que hay
también mucha gente buena, pero es una minoría selecta y cultivada, sobre todo
quienes conocen la vida y los valores de Occidente. Es el caso del autor,
Khaled Hosseini, que vive y triunfa en Estados Unidos, después de vivir años en
su Afganistán natal. Ha creado la Fundación que lleva su nombre destinada a
proporcionar ayuda humanitaria al pueblo de Afganistán. De todos modos,
salvando a tantos hombres buenos, en la mayoría impera el fanatismo y la
violencia a todos los niveles.
También esta novela es dulce porque ambas mujeres pasan del
enfrentamiento y rechazo a la amistad profunda llena de generosidad entre la
mayor, Mariam, y la menor, Laila. Es más, visto con ojos cristianos es una
historia de redención cuando la mayor lo da todo por la felicidad de la menor,
pagando un alto precio.
No resulta difícil evocar la realidad de la Redención obrada
por Jesucristo salvador de la humanidad, mujeres y hombres, que ni siquiera le
conocen ni le reconocen. Porque la Redención es una historia de amor que
comienza con la Encarnación del Hijo de Dios, asumiendo la naturaleza y
condición humana menos en el pecado y avanza dando amor a todos hasta dar su
vida en el misterio de la Cruz, seguido por su Resurrección gloriosa.
Precisamente la historia que nos ocupa, no siendo cristiana, es la de una
salvación obrada por Mariam hacia una persona más desvalida, Laila, pagando un
algo precio por pura generosidad. Y es así, porque el amor humano, tan limitado
en cualquiera de sus manifestaciones, cuando es auténtico, también es una participación
en el misterio Pascual de Jesucristo.
Finalmente, a pesar de tanto dolor y frustración esta
historia termina bien, incluida la emotiva carta de arrepentimiento del padre
de Mariam, Rahid, por no haber reconocido y tratado bien a esta hija bastarda, harami.
Sin embargo se tiene la fundada impresión de que el islam todavía tiene que
recorrer siglos hasta reconocer el valor de las mujeres y civilizarse mucho más.
Jesús Ortiz López
https://www.religionenlibertad.com/blog/972408793/Una-historia-de-redencion-en-el-islam.html